Este es el último de los secretos dentro de la sexualidad femenina y del sexo: la masturbación de las mujeres. Es una práctica igual de común que la de los hombres, con la diferencia de que ellas lo mantienen aún en secreto. Algunas estadísticas realizadas aproximadamente en los años 50 determinó que al menos el 62% de las mujeres se habían masturbando. Considerando que esos datos son de una época de oscurantismo y evidentemente antigua, es muy probable que esas cifras hayan aumentado significativamente en pleno 2016.
La masturbación es algo que, se hable o no de ella, existe. Aunque cada vez es más habitual que las mujeres hablen acerca del uso de juguetes sexuales no significa que sea algo común hablar del acto de “masturbación” en sí con toda la libertad. Cosa contraria a los hombres, para ellos es algo totalmente común hablar de este acto sin sentir siquiera un poco de pena, no importando incluso el tipo de público presente. El sexo por fin ha liberado muchos tabús, pero aún no ha pasado lo mismo con la masturbación.
Se trata de un celo de la mujer por su intimidad
La mujer es mucho más celosa que un hombre para hablar acerca de su intimidad. Por ejemplo, poco hablan acerca de su menstruación cuando en realidad es un proceso totalmente natural y normal. En el sexo, las mujeres a veces continúan siendo tímidas en cuanto a sus deseos, prefieren callar y dedicarse a complacer única y exclusivamente a su pareja. En cuanto a la masturbación femenina, ni se diga, ellas prefieren no platicarlo aunque lo practiquen. Cuando se encuentran en una relación, los hombres continúan masturbándose, mientras que las mujeres dejan de hacerlo. Se ha vuelto un tabú debido a que los genitales de ellas se encuentran ocultos, motivo por el cual no pueden explorarlos desde la infancia, por lo tal, cuando quieren hacerlo se les juzga. La masturbación femenina trae grandes beneficios, más de los que te puedes imaginar, es por ello la importancia de dejar los tabús de un lado y comenzar con la exploración femenina, pero sobre todo el tener placer por sí mismo. El sexo no es el único modo de tener un momento placentero ¡Prueba la masturbación! Olvídate de lo que diga la gente, preocúpate por ti.
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