domingo, 21 de mayo de 2017

Metotrexato y usos clínicos

El metotrexato es un medicamento que se usa para tratar la psoriasis grave, la cual es una enfermedad de la piel que genera manchas rojas y escamosas en ciertas partes del cuerpo. Dicha enfermedad no puede controlarse con ningún otro medicamento o tratamiento. 


Este también se utiliza para tratar determinados tipos de cáncer, sobre todo aquellos que inician en los tejidos que están alrededor de un óvulo fertilizado en el útero, cáncer de seno, de pulmón, etc. 


El metotrexato pertenece a la clase de medicamentos llamados antimetabolitos y su principal función es retardar el crecimiento de las células cancerosas para interrumpir la descamación. Asimismo, se puede tratar la artritis reumatoide al disminuir la actividad del sistema inmunitario.



¿Cómo se debe de utilizar el metotrexato?
La presentación de este medicamento es en forma de tabletas, las cuales deben administrarse por vía oral.

Sin ninguna excepción, es el médico quien dirá cuál es la dosis correcta y cuál es la frecuencia con la que debe tomarse el medicamento. 


Ciertamente, la administración puede provocar efectos secundarios leves o, en caso de administrarse mal, severos. 

Los más usuales son mareos, somnolencia, dolor de cabeza, inflamación y sensibilidad de las encías, pérdida de cabello, enrojecimiento de los ojos, etc. 

Mientras, entre los efectos secundarios severos se encuentran:


  • las convulsiones
  • confusión
  • pérdida del conocimiento


Es importante mencionar que ante el mínimo indicio de efectos graves hay que acudir inmediatamente con el médico o a urgencias, según el caso.

De ahí la importancia de administrarse el metotrexato únicamente bajo estricta indicación médica.

Metotrexato





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